Es verdad que hoy en día encontramos tatuadores en cada esquina, pero saben realmente quiénes son más felices al hacerlo, aquellos que tienen la oportunidad de dejar algo de ellos mismos en la piel del otro, esos que sienten un hueco en el estómago al ver sonreír a su cliente y ése es el momento, al ver tu tatuaje, cuando sabes que todo vale la pena.
Crear algo para alguien se ha convertido en la esencia de los grandes artistas, de los tatuadores que sienten algo de pena al ver partir su obra por la puerta y pensar que quizá jamás la volverán a ver, y se quedan con la experiencia, una fotografía que quizá no captura todo el significado ni las horas que pasaron dibujando, pero siguen, continúan sólo por esa sensación de darle a alguien algo suyo, darle un pedacito de su vida.
Si no has encontrado esto, hazlo, dibuja con tu toque, tus ideas, las de los que quieren tener un poco de tu talento, quien valora a un tatuador aprecia esto y se da el complemento perfecto. Haz feliz a la personas con tus dibujos y así encontrarás lo que el tatuaje ofrece para hacerte feliz.
Comments