Aunque es verdad que el resultado de una buena cicatrización debe contar con la voluntad y responsabilidad del cliente, muchas veces la mala técnica sale a relucir cuando los días pasan.
¿Notaste que tu tatuaje tiene partes sin tinta, normalmente dentro de las líneas? Esto pasa la mayoría de las veces porque el tatuador pasa varias veces la aguja por el mismo sitio al grado de lastimar la piel, y es el centro de la misma línea donde recae la lesión, cuando sana, la costra es más grande ahí y normalmente al caer se lleva la tinta. Si hay costra, hay más lesión en la piel, aunque ésta muchas veces no trae alguna consecuencia si dejas que se caiga sola, sí muestra una irregularidad en la aplicación.
Si te ha pasado que el tatuaje "se siente", es sencillo, tienes una cicatriz causada por el traumatismo provocado por una mala técnica, el tatuaje no debería sentirse como tal, tu piel debe sanar y sentirse como si no hubiera nada.
Ahora, si tienes unos días apenas que te has tatuado y tu tatuaje ha perdido líneas, la tinta se ha bajado mucho o simplemente se ha perdido, el problema aquí es lo contrario, tu tatuador hizo un trabajo muy superficial y la regeneración de tu piel se ha llevado la poca tinta que llegó a inyectar.
Hay un punto exacto entre aplicar la presión necesaria para inyectar la tinta y lesionar la piel, por eso es importante que el tatuador tenga experiencia, pues cada piel es diferente y cada una debe tratarse de forma especial.
Las líneas chuecas, las lesiones, cortadas, etc., no son provocadas por comer alguna cosa o ingerir alcohol, un buen tatuaje, manteniéndolo limpio, no tendrá problema, comas o tomes lo que sea. La herida de un tatuaje debe curar en unos días, tu proceso de cicatrización va de la mano con tus hábitos, tu organismo ya funciona en base a éstos, es obvio que mejores hábitos te harán recuperarte más rápido, como de cualquier lesión o enfermedad, tómalo en cuenta.